Chicos cada vez más solos


En la nueva lógica autocomplaciente y narcisista, lo primordial es realizarse individualmente, por eso el sacrificio por hijos y alumnos pasó de moda y la responsabilidad por los menores suele ser una obligación insoportable


Durante siglos, los chicos obedecían y los grandes protegían. La infancia y la adolescencia eran concebidas como etapas de la vida en las que se dependía de adultos que cuidaban a menores percibidos como incapaces de resolver la vida por sí mismos. La obediencia era la consecuencia natural: hacer aquello que los grandes mandaban y seguir su ejemplo era el modo de, algún día, llegar a ser un adulto autónomo. Grandes y chicos no conformaban un vínculo entre iguales, sino una relación asimétrica en la que experiencia, antigüedad y saber definían la preponderancia adulta.

Las Prácticas Restaurativas en Jesús de Nazareth

  En los 4 evangelios, encontramos a Jesús restaurando personas y relaciones. Tanto sus acciones como sus enseñanzas nos muestran algunas cl...