Construyan
casas y establézcanse; planten árboles frutales y coman de su fruto. Cásense,
tengan hijos e hijas, y que ellos también se casen y tengan hijos. Aumenten en
número allá, y no disminuyan. Trabajen en favor de la ciudad a donde los
desterré, y pídanme a mí por ella, porque del bienestar de ella depende el
bienestar de ustedes. (Jeremías 29:5-7)
Los capítulos 28 y 29 de Jeremías nos muestran dos
modelos de espiritualidad. El modelo de Hananías y el de Jeremías....